¿Pedir perdón por la conquista de América? Sí, conquista, así fue. Y con todo lo que supone el pasado con sus luces y sus sombras, pedir disculpas es como pedir perdón por dar a luz.
Cultura y civilización —y ellos mismos, los actuales iberoamericanos—, son fruto de nosotros hace 500 años. Sí, esos que dicen que pidamos perdón por descubrirlos y crearlos, se olvidan del mestizaje, obra española donde las haya, y de la vida que viven sin sacrificios rituales, canibalismo ni cerbatanas. Ellos son nosotros, y si no se reconcomieran por ese complejo de inferioridad y esa ignorancia ancestral, deberían saber de qué iba el asunto. Que le pregunten a los conquistados por Francia, Alemania, Holanda y sobre todo, a los hijos de la Gran Bretaña que todavía son exprimidos económica e ideológicamente pero con los que jamás se han mezclado ni lo harán; les dan asquito.
Pero si de algo tenemos que arrepentirnos en España es de ser unos «maricomplejines» y de no tener ni pajolera idea de nuestra historia y, por tanto, dejar que los «odiaespañas» de dentro y de fuera nos escriban el pasado, oculten la verdad en el presente y nos jodan el futuro. Peor que un iberoamericano haciendo el ridículo pidiendo por carta, exigiendo al rey soberano del Reino de España que pida perdón y agravándolo no invitándole a su investidura de mierda, es el espectáculo de los compatriotas que se avergüenzan de serlo y encima se suman a la caterva de «tontosdelculo» que dicen que debemos pedir perdón.
Qué ascazo da oír a progres de salón y nacionalistas que cobran de nuestros impuestos, vilipendiando la historia y sumándose a estas mierdas. Cuidado con inventarse la historia, que se vuelve contra ti, sobre todo porque se pega y te pueden reescribir la tuya.
Pero puestos a pedir perdón deberíamos pedírselo a Hernán Cortés, por no recordarle ni estudiarle como el mejor soldado de la historia; a Pizarro, por no tener en cuenta su origen humilde y su conquista legendaria; por no recordar que la primera declaración de derechos humanos fue obra de rey español; a Colón, que ni sabemos dónde nació y que si fuera de Vilanova i la Geltrú sería un héroe; a Núñez de Balboa, primer europeo en ver el Pacífico desde América; perdón a Ponce de León, conquistador de Florida, por no dimensionar su conquista; a Almagro, conquistador de Chile, por no admirar su acción en condiciones adversas; y a todos los reyes del siglo XV y XVI que crearon un imperio tras ayudar, con un puñado de valientes de verdad, a cumplir su función en la historia. Que buscaban oro dicen… ¡No! Iban a ir a buscar a Antoñita la fantástica.
Por cierto, no eran Borbones, eran Austrias, y se lo digo al atajo de paletos que piden que pidan disculpas a los que andaban en sus feudos franceses y no eran más que una familia noble en ese momento con tibias relaciones con los Capetos.
Lo peor es que gente que debería ser ilustrada para poder gobernar un pueblo con graves problemas y donde te matan por un dólar, se escuden en su historia inventada de hace 5 siglos para ocultar su absoluta ignorancia y mediocridad y que un grupo de indígenas ibéricos les apoyen demostrando dos cosas: ni saben lo que hacen, ni saben lo que dicen. Los que insultan nuestra historia, ofenden al jefe del Estado, corroborado por una constitución democrática, así que no deberían, al menos, cobrar del erario público y deberían tener el absoluto desprecio de la inmensa mayoría. Hay libros que lo explican. Hasta en Internet se busca y se encuentran. Vamos.
PD: Recuerdos a los que juzgan a el rey emérito no por su trayectoria política y democrática, sino por su vida personal. Que pidan su ingreso al club, muy numeroso ya, de huelebraguetas.es.
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