Pensamiento estratégico

Sin embargo, la improvisación tiene buena prensa. «Improvisaré sobre la marcha» que decía Indiana Jones cada vez que no sabía lo que se iba a encontrar. Y se admira la capacidad de improvisación de aquellos que se suben a un púlpito y predican sus mensajes, es síntoma de inteligencia no leer cuando, en realidad, leer es lo inteligente. Yo confieso que improviso mucho. Parece que la improvisación es más propia del sur que del norte y, como parece que al norte le va mejor, es para pensárselo.

Aplicado a la política 
Ahora vemos a políticos que se acercan para comunicarnos sus propuestas, es el momento de prestarles atención ya que es ese momento en el que puedes ver el fondo y no sólo la forma de las personas que quieren llevar las cosas públicas, porque improvisan y se les puede ver el plumero. Es curioso cómo algunos ahuecan la voz, otros te tocan mientras te hablan y otros te miran a los ojos. Algunos siempre llevan gente detrás, hay otros que prefieren ir más solos, estos me gustan más. En realidad con uno basta, si tienes alguien que te apoya y que camina junto a ti, es lo mejor. Es como un matrimonio bien avenido.

He visto grupos de tres imponerse en organizaciones grandes. Si tienes dos amigos de verdad de la buena nunca caminarás solo. Pero es algo tan difícil como encontrar alótropo de carbono cristalizado y, por tanto, casi imposible. Hay que diferenciar entre amigos, pelotas, palmeros, parásitos y «lametraseros» varios y eso es a veces complicado.

Las personas que tienen o usan ese pensamiento estratégico tienen que ser objetivos y realistas. Tienen que argumentar con hechos y datos la toma de decisiones para poder crear confianza en el equipo y ser consecuentes en cada uno de sus actos, así conectarán mejor con la gente. Por todo ello es importante tocar los temas que de verdad importan y son debate de fondo, las decisiones deberían rondar sobre asuntos básicos y, normalmente, tan polémicos que nadie los plantea ni siquiera en campaña y les aseguro que hay quien se los apunta, pero no hay…

A ver ¿el valenciano es un problema en el ámbito educativo en esta comunitat? ¿Alguna vez se planteará en serio y objetivamente sin pensar solo en un puñado de votos? ¿El feminismo radical imperante influye en la Administración de Justicia? ¿Se podrá plantear esto sin ser prejuzgado como facha machista impenitente? ¿Las personas mayores dependientes son tenidas en cuenta por la Ley de Dependencia? ¿Alguien se planteará poner esto en orden? ¿Las empresas pequeñas y autónomos serán alguna vez tratados con la visión que merecen? ¿Los derechos ya alcanzados serán continuamente cuestionados cada vez que cambien los colores de los gobiernos?¿Alguien se dará cuenta de que Alicante no puede estar más tiempo relegada en inversiones y protagonismo? ¿Lo sabrán en Madrid, en Valencia y los propios alicantinos? ¿Por qué no devuelven los bancos las ayudas en forma de mejores condiciones para jubilados, jóvenes y empresas de nueva creación? ¿Qué hay de disminuir el gasto público haciendo lo público más pequeño? ¿Podemos plantear la no duplicidad de organismos de una santa vez? ¿Queremos una verdadera colaboración público-privada en los servicios básicos? ¿Le importará a alguien? Podría estar así hasta mañana, pero no les castigo más.

Próximamente más preguntas.