“Me ha encantado el público de Alicante. Volveré”
Con esas palabras regresaba a su domicilio de Dordoña el maestro organista Francis Chapelet, tras ofrecer su primer concierto en la concatedral de San Nicolás, en mayo de 2017.
Había sido invitado por nuestra asociación, la Casa de Francia de Alicante, en aras de tender puentes entre el mundo cultural francés y el nuestro. Y es que el veterano músico posee una larga trayectoria de investigación y recuperación de los órganos barrocos españoles, desde los años setenta, principalmente los instrumentos de las dos Castillas.
“Ante todo, hay que saber en qué estado se encuentran los órganos de la catedral”, me previno Francis. En aquel momento, San Nicolás contaba con el órgano del coro, un Desmottes del 2004 y, sobre todo, el órgano histórico, dominando la nave desde su tribuna, y cuya caja se remonta al año 1591. Este último, sin embargo, estaba “en las últimas”, con apenas media docena de registros útiles. Entonces se optó por dar el concierto con el instrumento más reciente y finalizar con una improvisación en el “abuelo”.
Puesto que el organero Frédéric Desmottes debía afinar dichos instrumentos, éste se concertó con el organista invitado para adelantar a D. Ramón Egío, deán de San Nicolás, qué características convendrían para una restauración completa de la mecánica. En el proyecto —presentado más tarde a la Diputación y aprobado— se mencionaban 3 teclados de 52 notas, más un pedalero “alemán” de 32, 4 fuelles eléctricos y unos 2300 tubos nuevos, todo ello con un temperamento igual, a recomendación de Francis Chapelet, y siguiendo los preceptos de Juan Sebastián Bach.
Y mientras los talleres Desmottes se ponían a la obra en Landete (Cuenca), la Maison de France d´Alicante fue organizando, siempre por su cuenta, conciertos en 2018 y 2019, con la participación extra del maestro Uriel Valadeau, profesor de piano, órgano y coro en Bergerac.
El público alicantino, al que se entregaron unos 500 programas de 16 páginas a todo color, editados por nuestra asociación, respondió con entusiasmo ante el talento de los organistas.
Hoy día, la liturgia de San Nicolás dispone de mayor realce con el órgano ya renovado en 2021 con la venida del maestro Juan de la Rubia, contando además con su excelente organista titular José Cayuelas.
Es hora, pues, de sacarle el mejor partido a esa joya de nuestro patrimonio musical. Con tal propósito, la Casa de Francia de Alicante tiene programado el 12 de enero un primer recital de flauta (Bernard Wystraëte) y órgano (José Cayuelas) con obras de Bach, Haendel, Mozart, Fauré, improvisaciones de ambos músicos y, sobre todo, la interpretación de la obra “San Nicolás”, compuesta al efecto por el maestro Wystraëte.
Este evento preludia el proyecto conjunto de San Nicolás y de la Maison de France d´Alicante: la creación de un Ciclo Internacional de Órgano de Alicante. Los organistas invitados serán: Thomas Ospital (Iglesia St Eustache, de París); Carlos Fernández Bollo, joven promesa gallega; y nuestros dos alicantinos de adopción, Francis Chapelet y Uriel Valadeau. Se darán los conciertos los días 18, 19 y 20 de abril de 2024, con un homenaje final al maestro Chapelet que tiene en su haber la recuperación de unos 70 órganos por el mundo “mundial”. Se puede afirmar que Francis es el hombre que dialoga con el alma de los imponentes instrumentos.
El ciclo está destinado a repetirse año tras año (ya nos ha manifestado su interés un joven talento de Francia para 2025) para dar a conocer al gran público el mundo del órgano, con tan amplio repertorio, compañero de otros instrumentos solistas, orquestas o voces humanas y, sin duda, hacer emerger entre los más jóvenes posibles vocaciones, al amparo docente del Conservatorio de Música alicantino.
Con la sucesión de conciertos, profanos y aficionados irán descubriendo la sorprendente paleta de colores musicales que ofrece el llamado “instrumento de Dios”. Desde los graves más “tremendistas” sacados del pedalero, hasta la ternura de la “voz humana” y los trinos emitidos por los tubos más diminutos.
Alicante merece alzarse a un nivel musical internacional, teniendo a su disposición lo mejor del momento. Por nuestra parte, confiamos en recabar los fondos suficientes para sufragar dicho proyecto, invitando a organismos públicos y privados, así como a particulares, a ser copartícipes de este honorable empeño (vean nuestra dirección de correo).
Finalmente, citemos a Bach:
“La música no es para los oídos, sino para el corazón y el alma”
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