Mazón y los dioses

«Ante lo inesperado, ni los dioses están preparados». Lo dijo el gran Julio César y es verdad. El caudal del Nilo en tu calle es destructivo sí o sí. Hay que ver en qué calle vives y por qué puedes vivir allí. Y es que es muy fuerte que en esta tierra árida y semidesértica no se haya previsto en los últimos 60 años ni encauzar ni impedir construir en zonas inundables. Sí, tienes razón, es muy fácil decirlo ahora, pero la verdadera responsabilidad de este tema, en mi opinión, es claramente doble, aunque duela.

En primer lugar, no creo que la culpa sea del gobernante de turno al que le ha tocado la casualidad cronológica de mandar cuando nos ha caído la mundial. Tal vez haya que ver si san Pedro o santa Bárbara están en el complot. Es como si el presidente del gobierno de 2010, cuando España ganó épicamente el mundial de fútbol, tuviera que ser amado, apoyado y querido por todos eternamente. Es absurdo, ¿verdad? Pues considero que es igual de absurdo pedir el cese, la cárcel o llamar asesino al presidente al que le toca una desgracia como esta. Es de cortos pensar en que hay que tener un culpable para canalizar tu rabia o dolor y es malvado usar el de los demás para hacer tu politicucha de mierda contra tu oponente.

Se ha visto cómo en las manifestaciones orquestadas contra Mazón, donde no dudo que personas dolidas y sinceras han canalizado su malestar, se ha expulsado a gentes que pedían también responsabilidades a socialistas gobernantes en distintos puestos. De Sánchez y Ribera a Bernabé. Esta no es su manifestación, su pensamiento aquí no cabe, fuera de nuestro cortijo, la calle es nuestra, caca de la vaca. Esto es aclarador de cómo se usa la propaganda y los medios afines y palmeros apesebrados y cómo se utiliza el sincero dolor de la gente manipulando el mensaje. De vómito.

Creo que si la rabia y la desolación nos dejara pensar mejor, tendríamos justamente que pensar en lo que no se ha hecho ANTES DE LA DANA, cómo están los cauces, ver las cuencas erosionadas y peladas, ver la limpieza de las cabeceras, delimitar normas urbanísticas, impedir sótanos y garajes en zonas inundables (verdaderos lugares de muerte en estos casos), obligar a tener atalayas en las casas de campo con altura suficiente para rescates, etc. Todo esto no se ha hecho por ninguna de las administraciones anteriores desde la democracia, y no todas han sido del Partido Popular (que también). Ha habido Lermas, botanics y demás zarandajas.

Y, haciendo amigos, creo que, al menos en Alicante y comarca, sólo Zaplana acometió los encauzamientos necesarios en L’Alacantí que había sufrido esas gotas frías, ahora DANA, con muertos y destrozos mil que nos comimos con patatas los alicantinos. Hay que ser justos aunque no venda ahora decir las verdades. Me da igual.

Tras el emocionado discurso de Juan Antonio Sagredo (PSOE; alcalde de Paterna) en las Cortes, Gerardo Camps (PP; vicepresidente) sale a abrazarle (Fuente: canal de YouTube de «Expansión»).

Cierto es que si analizamos esta falta de previsión, de planificación y de obras en los periodos «interdanas», encontramos la primera culpabilidad de esta desgracia; lo peor es la inacción, lo peor es lo que no se hace, lo que no se acomete, lo que no se prevé. Por eso creo que Mazón ha dicho en las Cortes Valencianas lo que había que decir, que se pone a ello para evitar los daños futuros y que compromete su futuro político a su éxito en esa misión. Entre la lapidación que pide la oposición y la promesa de trabajar en soluciones prefiero esto, aunque sé que muchos no. Que se lo hagan ver.

Segundo, haciendo más amigos, creo que tenemos que ser sinceros y capaces de analizar que no hacemos ni p*** caso a las alarmas, alertas, avisos que nos mandan a tiempo o tarde, y eso tiene responsabilidades generales, porque debemos ser educados en los colegios, institutos y universidades con los riesgos naturales de cada zona y, evidentemente, nosotros mismos tenemos que asimilar que sacar nuestro coche del garaje o viajar con alertas o refugiarnos en plantas bajas nos puede matar. Somos también culpables. Aunque duela. Y como ciudadano y geógrafo también no me puedo callar que las alarmas fallan muchas veces y eso nos hace descreídos y autónomos a la hora de tomar decisiones ante «otra alerta naranja». Si ha habido 36 este año. «Pedrito y el lobo».

Además quiero añadir que no solo un gobernante se debe preocupar por lo que ha pasado. Esta tierra tiene que seguir viviendo, trabajando y produciendo. Ya hemos llorado y nunca olvidaremos. Pero igual que cuando nos deja un ser querido solo hay un camino, hay que seguir; es obligado y justo. No somos lemins que nos suicidamos en masa cada x tiempo. Somos integrantes de una sociedad que necesita levantarse, tots alhora.

Creo que si Mazón se olvida de su compromiso deberíamos sumarnos todos a pedir su ostracismo político y si hace más que sus antecesores en el cargo por evitar desastres y levantar el ánimo, lo suyo sería apoyarle para que siga creando un entorno más seguro para su tierra, que es la nuestra.

Posdata: Los únicos gestos que deberían salir constantemente en los medios son el del rey hablando con la gente, y el de Sagredo (PSOE) y Gerardo Camps (PP) abrazándose emocionados en el Senado. Esto daría paz, ánimo y, sobre todo, esperanza.