Como continuación de mi anterior artículo sobre la religión, la Iglesia católica, los creyentes y no creyentes, etc. quiero hacer una nueva reflexión sobre el tema, que aunque da para muchas páginas, intentaré resumirlo lo máximo posible, siempre que pueda expresar lo que quiero dar a entender.
Mucho se ha hablado, escrito, especulado, sobre el celibato de Jesús de Nazaret. La iglesia católica se ha preocupado hasta la saciedad en dejar claro que Jesús era soltero, y nunca tuvo descendencia, ni estuvo vinculado a ninguna mujer. Pero… hay otras escrituras, no solo las apócrifas, que tocan este tema y no precisamente como a la Iglesia católica le hubiese gustado.
Mucho antes de salir a la luz “El código Da Vinci”, ya había infinidad de escritos que trataban este tema del celibato de Jesús, pero con este libro y la película de Dan Brown parece ser que se movió algo más el tema. Nos remontamos a uno de los escritos menos recientes que el “Código Da Vinci” aquel en que el propio papa Gregorio Magno, en su sermón del año 591, comentaba que la prostituta del episodio del fariseo, la pecadora y la endemoniada María Magdalena, serían la misma persona (esto lo desmintió el Vaticano en el año 1969).
Pero claro, a raíz de esto y otros escritos anteriores, se dio mayor visión de realidad a que María Magdalena y Jesús estaban casados. Se llegó a decir que las famosas bodas de Caná, no eran otras que las de Jesús y María Magdalena, de ahí el milagro del vino y otros detalles. En los evangelios apócrifos, sí se entiende y se da por sabido que María Magdalena y Jesús estaban casados y que incluso llegaron a tener hijos. Si esto era así como parece ser, la Iglesia, lógicamente, lo rechazó de pleno, no podían dar marcha atrás a sus muchos años de inculcar a sus seguidores su doctrina.
Según estos otros evangelios desechados por la Iglesia, después de la muerte de Jesús, María Magdalena y sus hijos se habrían trasladado a Europa, concretamente al sur de Francia, donde fundaron la dinastía de los Merovingios; de todos es sabido que esta estirpe funcionó hasta que la propia Iglesia, valiéndose de artimañas, acabó con ellos. También es sabido que los Templarios estuvieron involucrados en el tema de la ayuda a los Merovingios, hasta su disolución y muerte a manos del rey de Francia ayudado por el Papa y la Santa Inquisición. Este otro tema viene a dar la razón a la cruel persecución que la Iglesia dedicó a los presuntos descendientes de Jesús.
Este artículo podría dar para varios libros enteros, sabemos que algunos están ya escritos, por lo que no voy a extenderme más, y creo que con lo escrito y la percepción de las personas tanto creyentes como no creyentes, se harán una somera idea de lo que quiero transcribir y dará que pensar a muchos.
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Con el máximo respeto, creo, tocayo de apellido Carrión, que incides otra vez, en temas de la Iglesia Católica. Y no para hacerle palmas precisamente. Soy primero humano, luego periodista independiente, posteriormente católico y licenciado en Teología por la Universidad Pontificia de Comillas regida por los universalmente considerados progresistas jesuitas. También soy licenciado en Filosofía y Letras. Me atrevo a decir que contra la Iglesia, como contra España, hay mucha leyenda negra. Es evidente que hay épocas oscuras y terriblemente negras en la historia de la Iglesia, pero las líneas fundamentales han sido siempre mantenidas y de ello se encargaron los concilios sucesivos en los que participaron los obispos del mundo, sucesores de los apóstoles. La leyenda negra es lo que es y yo no participaría nunca en difundirla. Un abrazo. Estoy abierto a dialogar contigo al margen de la Hoja del Lunes.