Uno de los retos más complicados que afronta la corporación municipal ilicitana que preside Carlos González frente al Gobierno de Rajoy es la cesión permanente de la Dama de Elche. Una comisión mixta Generalitat-Ayuntamiento de Elche, creada a instancias del consistorio ilicitano en abril, trabaja de forma conjunta en la vuelta del busto y ha tenido que esperar un año, por la interinidad del Ejecutivo, para iniciar la negociación con el Gobierno y el Ministerio de Cultura para que la Dama permanezca de manera permanente en Elche, su cuna de nacimiento, cuando se cumple el 119 aniversario de su hallazgo en el yacimiento de La Alcudia.
Difícil cometido, ya que el Museo Arqueológico Nacional se resiste a devolver la Dama, ya que es una de sus piezas más preciadas por los visitantes desde 1941. Según publica el Diario Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV), dicha comisión buscará que la pieza sea ubicada en el Museo Arqueológico y de Historia de Elche (MAHE) como subsede del Museo Arqueológico Nacional (MAN), donde actualmente se expone.
Arte íbero
Esta resolución destaca que el Ayuntamiento de Elche acometió la restauración del Palacio de Altamira para crear el MAHE y habilitó las infraestructuras necesarias para albergar a la Dama de Elche de forma temporal en el año 2006. Asimismo, deja claro que este museo «reúne las condiciones necesarias para acoger los fondos arqueológicos y convertirse, con las máximas garantías, en el museo nacional de referencia del arte ibérico, adscrito a la red nacional de museos arqueológicos del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte».
A través de esta comisión bilateral se pretenden impulsar las actuaciones y planes necesarios para la creación de una subsede del MAN en el MAHE, así como hacer propuestas sobre la elaboración de proyectos de gestión del patrimonio arqueológico y de museografía que afecten especialmente a las competencias e intereses de Elche. El alcalde ilicitano, Carlos González, ha mostrado a través de un comunicado su satisfacción por esta resolución, que supone «un paso más para la creación de una subsede del MAN en el MAHE y fruto de la estrecha colaboración entre el ayuntamiento y Consell», aunque ha asegurado que «aún queda mucho por recorrer para que la Dama regrese a la ciudad de forma permanente».
González ha indicado que el siguiente paso es la convocatoria de una reunión de la comisión bilateral, para posteriormente solicitar un encuentro con el Ministerio de Cultura, y exponer la propuesta de creación de esta subsede en Elche. Igualmente, ha dejado claro que este equipo de gobierno «va a hacer todo lo posible para intentar hacer realidad una reivindicación histórica de los ilicitanos como es el regreso permanente de la Dama».
Por su parte, la portavoz del grupo municipal de Compromís per Elx, Mireia Mollà, ha recordado que la creación de esta subsede «para devolver el busto íbero a casa de manera permanente» ya lo anunció la vicepresidenta de la Generalitat, Mónica Oltra, hace ocho meses cuando Elche acogió el pleno del Consell.
«No podemos estar más satisfechos y orgullosos de los compromisos del Consell», ha señalado Mollà, quien ha manifestado que desde Compromís se ha solicitado al Senado, a través de una moción, instar al Gobierno a que haga efectiva y definitiva la cesión de la escultura.
Desde su salida de la ciudad el 30 de agosto de 1897, la Dama únicamente ha vuelto a su cuna de origen en 1965, durante un periodo de 19 días, y posteriormente en 2006, cuando permaneció seis meses en la Torre del Homenaje del Palacio de Altamira, acon
dicionado para la ocasión. Dos fechas importantes para la ciudad, que el alcalde pretende que vuelvan a repetirse. Si algo especial tiene esta Señora ilicitana es su capacidad viajera.
Descubrimiento
La Dama de Elche, considerada una obra maestra del arte ibérico que los expertos datan en torno al siglo V antes de Cristo, es de piedra caliza y fue hallada el 4 de agosto 1897 en el yacimiento de La Alcudia por un muchacho de 14 años que colaboraba en unos trabajos agrícolas, Manuel Campello Esclapez. Un arqueólogo francés se la adquirió al propietario de la finca y la pieza fue a parar al Museo del Louvre, que pagó por ella 4.000 francos de la época. Allí pasó 40 años hasta que, durante la invasión nazi de Francia (1940), fue temporalmente trasladada a Toulouse. En 1941, una negociación entre los gobiernos de España y de Vichy (colaboracionista de Hitler) acabó con el traslado del busto al Museo del Prado, donde permaneció tres décadas. Desde 1971 pertenece al Museo Arqueológico Nacional.
El dilema de si la Dama de Elche debe permanecer en Madrid o volver a su lugar de descubrimiento se reabre cada vez que entra un nuevo gobierno, según la Cátedra Dama de Elche de la Universidad Miguel Hernández (UMH), partidaria de su vuelta desde “el consenso y la humildad”. La asociación Real Orden de la Dama reivindica constantemente la vuelta del busto a Elche, al considerarla una de las “señas de identidad” de la ciudad. Así lo ha solicitado también el equipo de gobierno municipal, de todos los signos políticos. En 2015 el actual conseller de Cultura, Vicent Marzà, visitó el busto en Madrid y pidió su retorno para “descentralizar los iconos culturales”. La Conselleria matizaba que hay que abrir un debate serio en torno a qué patrimonio pertenece a las comunidades autónomas y cuál sería de propiedad estatal.
La idea es que el Museo Arqueológico y de Historia de Elche (MAHE) sea subsede del MAN para convertirse en el principal centro de arte íbero de España. No sería nada nuevo en el panorama cultural español: en Mérida existe el Museo de Arte Romano y en Cartagena, el Museo Nacional de Arqueología Subacuática, ambos subsedes del MAN.
La Dama de Elche está considerada una obra maestra del arte ibérico, que los expertos datan en torno al siglo V de Cristo, aunque no se ha conseguido identificar a quién representa. Hay teorías que defienden incluso que no se trataría del busto de una mujer, sino de un guerrero al que se quería rendir homenaje.
Visita de los nazis
Heinrich Himmler, jefe supremo de la policía alemana y uno de los máximos impulsores nazis a favor del alzamiento, estuvo precisamente en el año 1940 visitando las instalaciones del Museo Arqueológico Nacional en Madrid y allí pudo admirar muy de cerca el embrujo y la seducción de una pieza arqueológica íbera tan singular como importante, la Dama de Elche.
El 22 de Octubre de 1940, la comitiva de Himmler realiza las visitas a los Museos Nacionales de El Prado, en donde el nazi se detendría durante rato ante el cuadro de Velazquez de “La rendición de Breda”, y posteriormente al Arqueológico, museo en el que se detuvo bastante más tiempo observando los objetos de las civilizaciones celtibéricas, examinando los objetos visigóticos y charlando sobre los paralelismos entre germanos y los antiguos pobladores de la península. Ocurrió aquí, en este museo, un hecho extraño…una de esas cosas que se vuelven opacas con el paso del tiempo y no se distinguen de lo que ocurrió en realidad. Dicen que Himmler se quedó maravillado con la Dama de Elche y que trató de lanzar interpretaciones sobre lo que representaba. Fue el primero y último encuentro entre “La bella y la bestia”.
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