La gente muy importante, muchas veces, lo es por ser sencilla y cercana. He comprobado cómo es casi siempre más fácil hablar con ellos que conseguir cita con cualquier asesor de algún político de un pueblo perdido.
Ángel es de esos que se pone al teléfono aunque no te conozca de nada y que te escucha; es de los que tiene los pies en el suelo siempre, de esas personas que transmite humanidad porque la lleva dentro y que sabe que su éxito viene de eso y de que habla claro, tan claro que nos sorprende porque, lamentablemente, hoy es una excepción el sentido común, la transparencia, la buena educación y la verdad.
Ángel Expósito es licenciado en Periodismo por la facultad de Ciencias de la Información de la Universidad Complutense de Madrid. Fue director de la agencia de noticias Europa Press (1998-febrero de 2008). A esta agencia accedió en segundo curso de la carrera, cuando comenzó como becario en la sección de reportajes. De ahí pasó, con veintisiete años, a redactor jefe adjunto al director; y ya con veintinueve asumió el cargo de subdirector de EP Noticias.
A partir de ahí, colaboró en Alto y claro y El círculo, de Telemadrid; en 59 segundos, de TVE; en 24 horas, de Radio Nacional de España; en el diario La Vanguardia con un artículo semanal bajo el epígrafe «El mirón perplejo» y en el diario económico Negocio con otro quincenal. Desde principios de 2002 y hasta su nombramiento como director de ABC, moderó los Desayunos informativos de Europa Press. También participó en las tertulias de La respuesta (2003-2004), Ruedo ibérico (2004-2006) y Lo que inTeresa (2006), todos ellos en Antena 3 Televisión y se encargó del resumen de prensa en La Linterna de la Cadena COPE, de 24 horas de Radio Nacional y en La brújula de Onda Cero. Entre 2008 y 2014, colabora también en La noche en 24 horas del canal 24 horas. Fue, de 2008 a 2010, director del periódico ABC. Y entre 2010 y 2011 condujo el espacio de análisis político Noche 10 y el informativo de La 10, una cadena de televisión generalista para España del grupo Vocento.
En la temporada 2012/2013 fue el director y presentador de Primera Plana, el informativo de mediodía de la extinta ABC Punto Radio. Desde el 18 de marzo de 2013 realiza esa misma función en la Cadena COPE en el informativo Mediodía COPE, además de colaborar como tertuliano en otros espacios de la emisora como en La Mañana de COPE. Durante la temporada 2014-2015 se hace cargo de la parte informativa de La Mañana de COPE tras la salida de Ernesto Sáenz de Buruaga. El 25 de agosto de 2015 empieza a presentar La Tarde en sustitución de Ramón García y desde el 1 de septiembre de ese mismo año colabora con Herrera en COPE.
Tras la salida de Juan Pablo Colmenarejo de COPE, el 27 de agosto de 2018 comienza a dirigir La Linterna, programa que sigue presentando desde entonces. Ha trabajado en la UE, EE.UU., Cuba, Venezuela, Colombia, Guatemala, Argentina, Letonia, Polonia, Rumanía, Moldavia, Ucrania, Afganistán, Pakistán, China, Emiratos, Kuwait, Irak, Siria, Líbano, Egipto, Chad, Sudán, Congo, Malí, Senegal, Camerún, Marruecos, Guinea Ecuatorial, Kenya, Tanzania, Turquía…

Alicante 5 de marzo, Real Casino de Alicante.
Pedro Picatoste (P): Es una antientrevista, te puedes imaginar.
Angel Expósito (AE): ¿Antientrevista?
P: Vamos a ver. Preguntas. La primera. Empezamos. ¿Qué tal fue tu infancia?
AE: Absolutamente feliz. O sea, yo solo recuerdo un chaval de barrio en la calle todo el día, sacando buenas notas, que era una auténtica virguería, y solamente puedo decir una palabra. Feliz.
P: Entonces, la segunda pregunta, ¿en el cole eras un empollón o un golferas?
AE: Las dos cosas. O sea, yo sacaba muy buenas notas, pero hasta COU, ya que repetí COU solo con matemáticas… Solo con matemáticas. En este caso, en femenino. Hasta entonces, sí, notazas. Pero creo que, si me tuviera que autodefinir, era más golferas que empollón.
P: Periodismo y ¿qué más? ¿Cómo te has formado?
AE: Yo empecé a querer ser periodista ya en el cole, haciendo un periódico en el colegio. Me encantaba lo de los cotilleos y lo de ir a hacer entrevistas a famosos en conferencias y en actos. Y yo creo que ahí me entró la vena. Luego hice otro periódico en el instituto, luego otro en primero de carrera y enseguida empecé a ser becario en Europa Press. Por lo tanto, periodismo desde siempre. Donde sí me formé y donde sí empezó a cambiarme el chip fue cuando hice el curso de defensa nacional en el CSDN del Ministerio de Defensa. Ahí me empecé a formar en lo internacional y en lo militar.
P: ¿Tus hobbies, si es que tienes tiempo para alguno?
AE: No. Nada. Ninguno. No, no tengo tiempo, pero mi hobby es viajar. Como «viajo poco» en lo profesional, viajar con mi mujer, viajar con mi familia y seguramente la cultura y la historia. También me gusta mucho el cine, el arte y pasear por las ciudades a donde viajo.
P: ¿Tu deseo pequeño?
AE: Mi deseo pequeño: pues ser feliz, tener una familia como la que tengo y seguramente, si tuviera que verlo ahora, disfrutar con lo que fuera de mayor, cosa que he conseguido.
P: ¿Tu gran meta? A lo mejor es lo mismo.
AE: Sí, seguramente. Pero ser buena gente y un tipo ético y decente como era mi padre.
P: ¿Algo de lo que no puedas prescindir?
AE: ¿En lo personal o en lo profesional.?
P: Como tú quieras.
AE: En lo profesional de mi equipo y en lo personal de mi mujer.
P: Te voy a hacer otra pregunta, me la voy a saltar y te la tenía para luego. ¿Tu equipo te teme?
AE: No. Mi equipo viaja conmigo al infierno mismo, si es preciso, y yo creo que no me teme. Es verdad que soy el director del programa y el líder de ese equipo, pero yo creo que la palabra temer no sería la adecuada. Si le preguntara a ellos, te dirían que no. Digamos que nos respetamos.
P: ¿Qué lugar te gustaría visitar que no has hecho?
AE: Pues me gustaría visitar Moscú, pero me negaron el visado. Estos cabrones. Me negaron el visado. Es que he visitado casi todo, pero me gustaría visitar a lo mejor a Japón, que no he estado nunca. África, América, Europa y muchos países de Oriente Medio me los conozco enteros.

P: Perfecto. ¿Tu comida preferida?
AE: Pues seguramente mucha, pero si tuviera que decir, el marmitako made in mi mujer, que sustituye el atún o el pescado por gambas o gambones. Impresionante.
P: ¿Y tu bebida?
AE: Mi bebida es un gin-tonic.
P: Bueno, es saberlo… Vamos a ver, ¿qué significa para ti la curiosidad?
AE: La curiosidad no es cotilleo. La curiosidad es la necesidad de aprender. Y para mí la curiosidad periodística en este caso es no parar de aprender nunca. Si vuelvo a Ucrania, aprender de los ucranianos. Si tengo que volver a Roma por lo que pase con el papa, aprender de los romanos y del proceso de cómo se elige un papa. Si tengo que aprender de la historia para entender la España de las autonomías, aprender de la historia de España. Si tengo una sección de ciencia, aprender del tema de ciencia de ese día. La curiosidad es no parar de aprender.
P: ¿Alguna gran persona que siempre recuerdas Aparte de la familia.
AE: Pues me cuesta decir una. Tal vez las decenas de misioneras que he conocido por el mundo. Si tengo que decir una, Ana Gutiérrez.
P: ¿Crees en la nobleza de la política?
AE: Cada día me cuesta más. O sea, creo en la nobleza de la política y en la nobleza del ser humano y tal. Son grandes palabras y queda muy bonito decir que sí. Pero cada día me cuesta más. Seguramente hay alguno. Pero cuesta.
P: ¿Qué es para ti el honor en tu vida?
AE: ¡Buah! Todo. Todo. El honor es… Seguramente mi padre, que en paz descanse, que aprendió a leer y a escribir en la mili. Aquella generación que hizo la transición, que curraron como bestias, que no sabían hacer la o con un canuto, pero que tenían un honor y una honradez impresionante.
P: ¿Con quién te gustaría pasar una larga velada? Personaje histórico.
AE: Un personaje histórico. Seguro que hay un montón. Así a bote pronto, pues fíjate, me gustaría pasar una larga velada con… Cervantes. Conoció Oriente Medio, conoció el Magreb, conoció el Mediterráneo y no hemos cambiado tanto.
P: ¿Las palabras cambian el mundo?
AE: Por desgracia, no. El mundo está, como está de mal, a pesar de las palabras.
P: ¿Qué papel tiene la amistad en tu vida?
AE: Amistad. Mucha. Yo me acuerdo mucho de mis amigos de chaval, de mis amigos de la adolescencia, que siguen siendo amigos, y de mis compañeros de trabajo.

P: A ver, esta pregunta es… Tienes más de dos millones de oyentes todos los días, cada vez más, además. ¿Crees que eres importante?
AE: Siempre y cuando no se te vaya la pinza, sí. O sea, en el momento en el que levites, dejes de tener los pies en el suelo y dejes de ser aquel chaval de Cuatro Caminos que era mi barrio en Madrid, habría dejado de ser importante para ser un problema. Dicho lo cual, somos una radio comercial y, o yo tengo oyentes, o nos vamos a la mierda.
P: ¿Cuál es el principal pecado capital de la gente, según tú, que conoces tanta?
AE: La soberbia o el engreimiento o el creérselo demasiado. Sin duda.
P: ¿No la estupidez, no la cobardía?
AE: Bueno, la cobardía puede ser, pero la cobardía es una condición humana. La soberbia es un pecado.
P: ¿Te cambiarías para ser de otro país?
AE: No.
P: Piénsalo otra vez.
AE: No, no, no, no. Tajantemente, no. Pero ni ser de otro país, ni dejaría de ser europeo. No somos conscientes de lo que es la Unión Europea.
P: ¿Tu opinión sobre el futuro en general?
AE: ¿Nacional o mundial?
P: Mundial.
AE: Jodido. Jodido, pero partiendo de la base de que estamos en la mejor región del mundo para ser refugiado, para ser jubilado, para ser mujer o para ir al hospital. Por lo tanto, dentro de lo mal y de cómo está el planeta, estamos en la mejor región del mundo, por lo tanto, saldremos. Salió este continente de una Primera y de una Segunda Guerra Mundial como para no salir de esta.
P: Perfecto. Termino con… si tienes pensado tu epitafio.
AE: ¿Mi epitafio? No, pero… Fíjate, el otro día me hice una variable del seguro por si la palmo en algún accidente de coche por ahí fuera. Pero no.Un buen tipo*.
P: ¿Nada más?
AE: Nada más. Y nada menos.
P: Y nada menos. Nada, simplemente termino con algo de Alicante. Sé que tienes recuerdos aquí de infancia, pero…
AE: Pues recordaría… Te lo venía diciendo antes en el coche. Mis primeras vacaciones que tengo recuerdo fueron en un hostal en Villajoyosa. Entonces se llamaba Villajoyosa, sin valencianismo, sin la vila. Era Villajoyosa. Y lo que no recuerdo era el nombre del hostal o el bar que había debajo donde comíamos unas almendras fritas increíbles, típicas de la zona. No se me olvida. Aquella pensión y las almendras fritas con sal del bar de abajo.
P: Muchas gracias, Ángel.
AE: ¿Te ha servido?
P: Sí. Gracias.
*en la charla del pasado miércoles en el Real Casino durante la misma nombró otro posible epitafio: «O es que soy tonto o es que no mando».
Excelente Pedro
🤗