Dicen que el tiempo es la prueba del éxito y normalmente es así. Hoy se habrá celebrado ya la inauguración del 36 Festival de cine de L’Alfàs del Pi, que durará con sus actividades hasta el día 20 de julio. Un esfuerzo de todo un pueblo y sus administraciones para poner en el mapa un lugar que, sin duda, lo merece. Así lo saben gentes de todo el mundo que eligieron L’Alfàs para vivir.
Cada verano, artistas de renombre recogen sus faros de plata en la Casa de Cultura y pasan unos días promocionando el lugar y a ellos mismos. Este año se premia a Malena Alterio, Vladimir Cruz y a Luis Zahera. Luis Larrodera y su equipo dirigen el evento con el trabajo de todo el Ayuntamiento detrás.
En Alfàs todos esperan su festival, es cuando el nombre del poble está en todos los medios, es cuando se identifica lo cercano como un hecho colectivo, es donde todos ayudan y colaboran para que cada edición sea mejor que la anterior.
Así, con el esfuerzo de todos, año a año se consigue ese éxito que solo el tiempo otorga. Esa satisfacción de tener un evento que se espera y que comienza para la próxima edición trabajando el mismo día de la clausura. Como la Feria de Cocentaina, las Hogueras, la Nit del Albà, el Oriol, los Moros y Cristianos, los fuegos de la Olla de Altea, etc. El Festival de Cine de Alfàs tiene esa singularidad y tradición, además con un eje tan cambiante y apasionante como es el mundo de la imagen, las tendencias, la cultura, el cine; el arte a fin de cuentas.
El camino recorrido es impresionante y el que viene todavía más. Y es que los esfuerzos culturales siempre tienen esa recompensa de su validez, de su universalidad y de su interés. El medievalista y filósofo J. Huizinga resumió magistralmente la importancia de la cultura con una frase breve y clara: “Si deseamos preservar la cultura, debemos continuar creándola”.
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