A Dios y a san Francisco de Sales

Escribo este artículo en honor al patrón de los periodistas y escritores, san Francisco de Sales, cuya festividad se celebra por la Iglesia Católica el 24 de enero, fecha de su muerte en Lyón el año 1622. El papa Pío XI lo proclamó patrón de periodistas y escritores en 1923. Fue un excelente escritor sagrado y, siendo sacerdote, primero, y obispo de Ginebra, después, mantuvo constantes disputas con los calvinistas suizos y de su Saboya francesa, utilizando, con frecuencia, para difundir sus pensamientos, hojas que pegaba en las calles o que introducía en las casas por debajo de la puerta. Una forma pionera de prensa y propaganda evangelizadora.

Convirtió al catolicismo a miles de protestantes calvinistas. Eso cuentan sus biógrafos, los cuales también narran que sufrió algún que otro atentado de seguidores extremistas de Calvino, discípulos de los que asesinaron, en la hoguera, a nuestro compatriota (teólogo, médico, investigador, matemático y astrónomo) Miguel Servet, a las puertas de Ginebra, en 1553, diecisiete años antes de que naciera Francisco de Sales. Ambas son historias relacionadas con la libertad de expresión, quiero decir contra la libertad de expresión.

Estoy encantado de sentirme protegido por alguien tan inteligente y tan santo como este Francisco, uno de los escritores sagrados que se ganó ser proclamado doctor de la Iglesia, honor reservado a escasos varones y mujeres del santoral eclesiástico, entre ellas nuestra santa Teresa de Jesús, Teresa de Ávila. De uno y de la otra pueden leerse escritos que merecen ser visitados en internet. El libro más famoso de Francisco de Sales, Introducción a la vida devota, está entre los que pueden disfrutarse gratis. No entiendo a quienes aborrecen y hablan mal de Dios, de la Virgen o de los santos. Lo atribuyo a la ignorancia. Insisto en que la Historia Sagrada es una parte esencial de la Historia de la Humanidad, como bien le decía un famoso socialista francés a su hijo cuando no sólo le negó autorización para librarse en el colegio de la asignatura voluntaria de Religión, sino que le incentivó para estudiarla lo mejor posible.

La Asociación de Periodistas de la Provincia de Alicante (APPA) celebra todos los años, en torno a la fiesta de su patrón, diversos actos, entre los que destaca la Gala Off The Record, que este año tiene lugar este jueves, 8 de febrero, en el ADDA de la Diputación, acto en el curso del cual se entregará el Premio Libertad de Expresión al reconocido periodista y gran escritor Manuel Mira Candel. En esta conmemoración se presenta la revista de la APPA, Anuario 2023, abierta a todos los asociados y que aporta el punto de vista de un centenar de colaboradores sobre los acontecimientos más señalados a nivel provincial, nacional e internacional. El Anuario es un canto a la diversidad. No se trata de un periódico, sino de una revista, una recopilación de breves ‘ensayos’ que conforman un libro de más de cien amplias y bien diseñadas páginas de interesantísima lectura.

La palabra merece el máximo respeto, como los hechos que relata. Están hechas las palabras para entenderse; no para manipular, como hicieron aquellos periódicos de Nueva York, en 1905, cuando entrevistaron al máximo dirigente mundial de la Iglesia Anglicana, el arzobispo de Canterbury, en la primera visita a Estados Unidos. Máxima expectación; rueda de prensa en el mismo trasatlántico y uno de los periodistas le pregunta al considerado ‘papa de los anglicanos’: “¿Qué piensa Vuestra Eminencia de los prostíbulos de los barrios del este de Manhattan?” El arzobispo preguntó a su vez: “¿Hay prostíbulos en los barrios del este de Manhattan?” Algunos de los periódicos abrieron, al día siguiente, sus portadas con este titular: “Primera pregunta del arzobispo de Canterbury al llegar a Nueva York: ¿Hay prostíbulos en los barrios del Este de Manhattan?”.

Tristemente, medios de comunicación en papel o digitales y muchas redes sociales manipulan, insultan , mienten, destripan. No hay respeto a los hechos y se abusa del derecho a la libertad de expresión como nunca antes. Ya no se respeta el significado de las palabras. Y lo peor de todo es que apenas hay ya hombres de palabra, ni mujeres de palabra; que para todo lo malo hemos alcanzado la plenitud de igualdad. ¿No han advertido que somos igual de mal hablados los unos que las otras y les ‘otres’?

Posdata: los castellano-manchegos festejan a san Julián

La Casa de Castilla-La Mancha en Alicante acaba de celebrar la fiesta del patrón de Cuenca, san Julián. Entre otros actos ha destacado una conferencia del catedrático de la Facultad de Ciencias de la Educación de la Universidad castellano-manchega, Martín Muelas, quien no se limitó a glosar la vida y milagros del que fuera preclaro obispo de la capital conquense en tiempos de Alfonso VIII, sino que realizó una interesante disertación sobre las corrientes migratorias que hubo desde las tierras manchegas a las valencianas desde hace siglos y especialmente a la provincia de Alicante en los años cincuenta y sesenta del pasado siglo XX. Como asunto anecdótico sugirió que acaso el nombre de san Julián, con el que se conoce también a la Serra Grossa próxima a la capital alicantina, pudiera deberse a la iniciativa de inmigrantes conquenses devotos de san Julián.

El conferenciante fue presentado por el presidente de la casa regional, Fernando Jiménez, y el auditorio estuvo formado por numerosos socios de la entidad, así como por el senador por Cuenca, Benjamín Prieto; el secretario de la Federación de Casas Regionales, Francisco Page, y el presidente de Amigos de las Casas Colgadas-Casa de Cuenca, Antonio Buendía.