Los alicantinos hemos pasado muchas veces por una de las calles más céntricas de la capital. Me refiero a la calle Poeta Campos Vasallo. Pero, ¿nos hemos preguntado quién es el personaje al que el Ayuntamiento dedicó esa calle?
Rafael Campos Vasallo destacó en diversas actividades como novelista, profesor, articulista… pero es en la poesía donde alcanzó más renombre, hasta el punto de que se le conceptúa como uno de los principales poetas alicantinos del siglo XIX.
Vamos a ocuparnos brevemente de su trayectoria y apreciaremos cómo su figura debe estar siempre en el recuerdo de los lucentinos, ya que sus aportaciones fueron muchas, importantes y dieron renombre y lustre a nuestra ciudad.
¿Quién fue Rafael Campos Vasallo?
Rafael Campos Vasallo (1849-1902) nace en Alicante el 24 de octubre del año 1849. Gran amante del estudio, cursa Peritaje en el Instituto Provincial de la capital lucentina, obteniendo el título en 1865.
Deseoso de profundizar en los estudios mercantiles, cursa en Madrid la carrera de Profesor Mercantil, que completaba su inicial preparación en Peritaje. Obtiene el título de Profesor Mercantil en el año 1889, tras brillantes estudios que lleva a cabo en la Escuela de Comercio de Madrid.
Cabe resaltar que figura a los dieciocho años como redactor de La Iberia, desarrollando su actividad en dicha publicación durante los años comprendidos entre 1867 y 1872, ambos inclusive. Fue redactor-corresponsal de varias revistas extranjeras de Argentina, Cuba, Portugal… como luego expondremos.
En “Álbum poético”, se recogen destacadas aportaciones de Campos Vasallo en el mundo literario. Pero no es tan solo este conjunto de poemas el que tiene por autoría a nuestro ilustre, como veremos en el curso de este trabajo.
Es un voraz lector de temas muy diversos, lo que le dio una cultura muy profunda, permitiéndole abordar los distintos campos de los que se ocupó con gran rigor y profundidad.
Se traslada siendo muy joven a Madrid, donde reside algún tiempo. Durante su estancia en la capital española, como señalan Milego y Galdó, militó en las filas de los defensores de las libertades, conservando constantemente, dentro de las ideas monárquicas, el matiz democrático.
Llegó a ocupar importantes cargos, entre ellos el de jefe superior de Contribuciones del Banco de España.
Fallece en Alicante el 20 de septiembre de 1902 y los actos fúnebres fueron seguidos, plenos de sentimiento, por muchos alicantinos admiradores de la obra ingente de este ilustre lucentino, verdadero prócer en todos los sentidos.
Sorprende su gran sensibilidad lírica y poética, que hacía compatible con la más “prosaica” dedicación al mundo de la economía, la ciencia tributaria y el comercio.
Algunas de sus principales obras
Fue un prolífico escritor. Algunas de sus más importantes obras, son estas:
- “Un recuerdo” (1869).
- “Mi álbum” (1870).
- “Ante la tumba de Quijano” (1874). Un trabajo fundamental de nuestro autor.
- “Certamen literario” (1876). Con algunos de sus mejores poemas.
- “En la Huerta de Alicante” (1876). De puro sabor alicantino y alicantinista.
- “Porvenir de los maestros” (1877). En el plano de las Ciencias de la Educación.
- “A Calderón” (1881).
- “Artistas en miniatura” (1883).
- “El Calvario, velada literario-religiosa” (1884). Con unos bellísimos poemas.
- “Composiciones presentadas y Memoria, leídas con motivo de los Juegos Florales” (1884).
- “Memoria leída en la Junta General de Accionistas” (1886).
- “Memorias acerca del estado de la Escuela de Comercio de Alicante” (del curso 1889-90 al curso 1898-1899).
- “La esperanza” (1887).
- “El lunar de tu garganta. ¡Tierra!” (1892).
- “A Zorrilla” (1893).
Recoge, además, abundante material noticioso sobre los acontecimientos literarios de la segunda mitad del siglo XIX como “En la inauguración del Teatro Español” o “Introducción a las Veladas Literarias del año 1881”. Estos escritos, constituyen una de las partes más importantes de su vasta producción.
“Mi álbum” es una colección de ensayos. En este libro recoge las tendencias románticas de Zorrilla y Bécquer. Análoga influencia se observa en sus poemas “Lo que dicen las aguas” y “Jerusalén”.
Su “Certamen literario” versa sobre el certamen celebrado en Alicante el día 8 de mayo de 1876, que constituyó un verdadero acontecimiento de índole cultural en la capital del Benacantil.
De gran valor es “En la Huerta de Alicante”. Posiblemente, en nuestra opinión, uno de los puntos más destacados de su producción literaria sean sus composiciones dedicadas a Alicante y los estudios sobre distintos acontecimientos literarios en nuestra ciudad o su entorno. Es, sin duda, un cantor poético de Alicante y creemos que este conjunto de aportaciones literarias sobre nuestra tierra no es reconocido en todo su valor. Todo ello lo hace, en todas sus partes, con un estilo romántico que nos recuerda, en cierto modo, los perfiles poéticos de Zorrilla y de Bécquer, aplicado siempre, naturalmente, a ensalzar la belleza de nuestra terreta.
El libro “Porvenir de los maestros”, una obra de Ciencias de la Educación, está escrito en colaboración con otro gran autor, Ricardo Sánchez Palacio. En este punto, debemos inscribirlo como un estudioso de la pedagogía, otro epígrafe muy poco conocido de Campos Vasallo.
Respecto a “A Calderón”, estamos ante una oda galardonada en el certamen celebrado por el Instituto Provincial de Segunda Enseñanza de Alicante, el día 25 de mayo del año 1881. Forma parte del conjunto de sus escritos dedicados a los clásicos.
Periódicos y revistas en los que colaboró
Su actividad periodística es incesante y colabora en numerosos medios de comunicación escrita. He aquí una sucinta relación de los periódicos y revistas en los que colaboró:
- “Revista Hispanoamericana”, de Buenos Aires.
- “Cuba Española”, de La Habana.
- “El Comercio”, de Lisboa.
- “La Iberia”, de Madrid.
- “La Correspondencia”, de Alicante.
- “Revista de Instrucción Pública”.
- “El Pollo”.
- “El Derecho y el Deber”.
- “Álbum Poético”.
Premios y galardones
Obtuvo diversos premios, tanto en poesía como en prosa, así como por sus trabajos de investigación histórica.
Estamos ante un laureado poeta que logró en este campo un amplio número de galardones y reconocimientos. Asimismo destacan sus condecoraciones, entre ellas Oficial del Águila Tolosana y Caballero de la Rosa de Brasil.
Pero la poesía y la docencia son acaso dos de sus principales dedicaciones y en las que sobresale de una manera singular. En un apartado de nuestro trabajo nos ocupamos de su labor educativa y pedagógica, que merece situarle entre los principales educadores y en cierto sentido “pedagogos” en la esfera alicantina. Su actividad en la Escuela de Comercio de Alicante es realmente notable, formando en las artes mercantiles a varias generaciones de alicantinos.
Su estilo poético participa de los caracteres del romanticismo. Aboga por un regreso del ser humano a la naturaleza. Cansados de la lucha por la razón y la búsqueda de la verdad, los poetas románticos buscan la libertad formal y el efecto emocional. Emplea nuestro autor en su poesía factores antiguos y folclóricos.
En la poesía de Campos Vasallo se exalta lo pasional, empleando muchas exclamaciones e interrogantes de tipo retórico, con predominio del sentimiento y la emoción sobre lo puramente racional y lógico.
Todo ello produce en el lector una admiración por la belleza de su estilo, el dominio del factor emocional y la musicalidad de las frases.
Actividad educativa y pedagógica
Su actividad docente, como ya expusimos, se halla estrechamente vinculada a la Escuela de Comercio de Alicante. Es nombrado profesor ayudante por orden de la dirección general correspondiente, con fecha 20 de enero de 1888. En sus Memorias recoge de forma sumamente pormenorizada la vida de esta prestigiosa institución docente alicantina en el amplio período que va desde 1889 hasta 1900, registrando con rigor máximo sus diversos acontecimientos y vicisitudes. Así, en la memoria del curso 1891-1892 se inserta el discurso del profesor Campos Vasallo en la inauguración solemne de dicho año académico, uno de los más fecundos de la institución, haciendo ver que el nuevo local del número 63 de la calle Mayor, pese a estar situado en sitio muy céntrico, resultaba ya insuficiente ante el notable crecimiento de demanda estudiantil, siendo absolutamente necesaria la construcción de un nuevo y moderno edificio para la Escuela.
Junto a la docencia en el primer centro educativo mercantil alicantino, una segunda vía de relación de Campos Vasallo con la enseñanza y la instrucción es su vinculación a la Sociedad Económica de Amigos del País de Alicante, institución creada en el año 1834. Tras su reorganización, se constituye, en una etapa de pujanza, en sesión celebrada el 8 de noviembre del año 1880, la primera Junta Directiva definitiva de este segundo estadio, de la que es director Clemente Miralles de Imperial. Las secciones son las de Agricultura, Industria, Comercio, Instrucción y Literatura y Bellas Artes. Campos Vasallo es nombrado secretario de la Sección de Instrucción, cuyo presidente es Manuel Senante y Sala, con la vicepresidencia de Pedro Deltell y la vicesecretaría de Luis Poveda.
Al tiempo, nuestro docente alicantino colaboró en el “Boletín de la Sociedad Económica de Amigos del País de Alicante”, con importantísimos trabajos de variados temas.
Estudiosos de su figura
Entre los estudiosos, directa o indirectamente, de la figura y aportaciones de Campos Vasallo, podemos destacar los siguientes:
J. M.ª Beltrán Reig, J. Moratinos Iglesias, J. Calatayud Bayá, M. Rico García, José María Milego Anglada, Antonio Galdó López, Benedicto Mollá y Bonet, A. Montero, E. Rubio Cremades… Son inagotables y serios los estudios parciales hechos sobre este polifacético autor. Falta el trabajo, en cierto modo definitivo, que recoja, de una parte, su biografía, de un modo extenso y pormenorizado, y de otra unas obras completas que sin duda tendrían una extensión considerable y permitirían conocer más a fondo caracteres del estilo y la temática del autor. Pero creemos que este modesto trabajo abre puertas y anima a futuros investigadores de Campos Vasallo, realmente una personalidad que dignificó nuestra provincia y realizó notables contribuciones a la cultura, la literatura y el periodismo. Este singular personaje se lo merece, pero al menos podemos decir que son estos apuntes parciales aquí expuestos una primera línea de investigación.
Libros en los que se recogen aportaciones biográficas o bibliográficas sobre Campos Vasallo son, entre otros, “La enseñanza en la ciudad de Alicante” (1981), “Diccionario abreviado de personajes alicantinos” (1977), “Alicantinos ilustres” (1889), “Historia de la educación en Alicante” (1986), “Ensayo biográfico-bibliográfico de escritores de Alicante y su provincia” (1888), “Historia de la provincia de Alicante”, tomo V (1985), y otros varios que no detallamos por no hacer prolija la exposición.
Consideraciones finales
No tenemos noticia de la existencia de algún trabajo monográfico sobre nuestro personaje, todo lo amplio y documentado que sería de desear. Animamos a los investigadores de la Universidad de Alicante a que dediquen una tesina o incluso una tesis doctoral al estudio de Campos Vasallo.
Enriquecedor artículo, admirado señor Moratinos. Y abriendo caminos. Un cordial saludo.
Muchas gracias.
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