El domingo, dando cuenta de un arroz de secreto y ajos tiernos junto a mis cinco hijos, mis nueras, mis dos nietos (estos aún pequeños) y la bisabuela, tuvimos una interesante conversación sobre el estado de las pensiones.
—Vosotros, los boomers (así me llamaron mis hijos), al jubilaros invertís la pirámide generacional. Va a haber más jubilados que gente en activo.
Y siguieron comiendo, como si tal cosa. No tuve más remedio que contestarles. Y perdonen ustedes el tono y el discurso, sobre todo si no son de esta generación.
—O sea, nosotros, los que llevamos una media de 40 años trabajando y aportando a la Seguridad Social, ¿somos los culpables de la crisis de las pensiones?
No me parece justo que se culpabilice a nuestra generación de la crisis de las pensiones.
Tal vez vosotros, los millennials, que sois los mas preparados de las últimas generaciones, deberíais buscar soluciones… Y no vendría mal que os fijarais en lo que hicimos los boomers para mejorar nuestra sociedad. Tan bien preparados estáis que seguro que conseguís lo que los boomers no conseguimos: que la familia sea el centro de las políticas como célula básica de la sociedad. Y cuando haya elecciones generales, que parece que no va estar muy lejos este momento otra vez, ya que se presentan varios partidos políticos, leed sus programas, ved sus propuestas, discernid a quién dais el apoyo para gobernar los próximos cuatro años. Es el momento de aportar soluciones de forma activa, como dicen en esta tierra: poquet a poquet.
Para la solución de las pensiones, lo primero es que haya un relevo generacional: que haya una política de fomento de la natalidad, que cuiden de la familia con una conciliación de la vida laboral y familiar real. En nuestra generación, aquellos que apostamos por tener una familia numerosa, lo hicimos de forma consciente y responsable. Para ello renunciamos a cosas materiales y mirad que la publicidad nos bombardeaba con: «compra esto y serás feliz», «sin esto otro no eres nadie», etc.
Los boomers nos metimos en la pomada para cambiar nuestra sociedad desde dentro, como se da la vuelta a un calcetín. No tuvimos miedo a tener una familia grande porque más grandes son las satisfacciones de tener hijos/as y aportar personas buenas, responsables, leales y trabajadoras a nuestra sociedad, a través de nuestras familias.
Si vosotros, los millennials, sois capaces de tener familias buenas, responsables, leales y trabajadoras, seréis capaces de encontrar las soluciones para dejar a vuestros hijos un mundo mejor. Dejad que nosotros, los boomers, que ya tenemos el sol a la espalda e incluso alguno pide pista de salida, podamos disfrutar de una vejez activa habiendo vivido una vida plena y pudiendo pensar que han merecido la pena nuestros desvelos, porque sois la mejor inversión que hicimos en nuestra generación… y también para nuestras pensiones.
Benito Zuazu
Padre de Familia Numerosa
Tú fe es encomiable.
Un abrazo
Pedro, hay que hablar bien de las cosas buenas, lo mejor que tenemos nuestras familias!!
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Ojalá el motor de los cambios en la política fueran precisamente estos principios.
Maria, estamos condenados al éxito!!! Seguro que estos principios CALAN en nuestros políticos, por el empuje de asociaciones como ASAFAN!
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