Una publicación de la Asociación de Periodistas de la Provincia de Alicante

Balones a la olla

Club de fútbol en busca de presidente… De Castillo con plenos poderes a Castillo de naipes en quince días

Fuente: Hércules de Alicante Club de Fútbol.
Como en la obra de Luigi Pirandello Seis personajes en busca de autor, el Hércules CF también está a la búsqueda, pero en este caso de un presidente, una cabeza visible que al menos figure por encima del propietario Enrique Ortiz. Lo que pasa, que también como en otra obra, en este caso la novela de Delibes, la sombra de Ortiz, a modo de ciprés, es alargada. ¡Qué cosas! El ciprés es el árbol simbólico de los cementerios, vaya metáfora para un Hércules cada vez más muerto.

Del estilo de Luigi Pirandello y sus formas se dijo, que se fue cuajando cada vez más el llamado —Teatro del absurdo—, otra metáfora desdichada. ¿Les parece poco ABSURDO lo que viene sucediendo en el Hércules desde hace tanto tiempo?

Antes de dar por concluida la liga, a dos semanas del final, a modo de golpe de efecto, Ortiz, el propietario de la entidad, anunció la salida de la presidencia de Carlos Parodi y la entrada como nuevo presidente del mediático empresario Luis Castillo. Eran los primeros días de mayo.

Luis Castillo es un hombre mediático. Conocido y popular en Alicante, líder del Grupo di Roma en otros tiempos, propietario del Hotel Boutique de Alicante Siglo XVII, también en el pasado presidente del Lucentum, club de baloncesto que estuvo en lo más alto y se vino abajo, con deudas acumuladas que asumieron las instituciones.  Y en la actualidad, presidente de la Asociación Provincial de Hoteles de Alicante.  Castillo es uno de esos personajes grandilocuentes, fatuos, a los que gusta más un micrófono que a un niño un caramelo. Raramente se borra, raramente pasa desapercibido, a Castillo le gusta figurar, sí o sí. 

Luis Castillo (Fotografía: Rafa Arjones).

¿Qué habrá pasado? El personaje podría haber pagado por llegar a ser presidente del Hércules y toda la notoriedad que eso supone. En un margen de quince días ha renunciado a una proposición que ya había aceptado. Independencia, margen absoluto de actuación, decía el primer comunicado. Al parecer los siguientes contactos fueron desgranando otras cosas, tal es así que sin llegar a tomar posesión vino la renuncia. Una primera presentación postergada a una semana más tarde y luego tras el “me lo estoy pensando” el desistimiento.

Ortiz ya hizo un experimento semejante con Perfecto Palacio y Juanjo Huerga —fiscalmente acabó mal este último—. Cuando se dio cuenta de que la cosa funcionaba, la prensa hablaba bien, su hija mayor al frente de la oficina no pasaba de contable o administrativa y él estaba poniendo el dinero y financiando el proyecto, le entró envidia, aquello de la “pelusilla”, ¿qué pasa, pero que yo pongo la pasta y vosotros figuráis y hacéis lo que queréis? Y así acabo la cosa.  

No es menos cierto, que quizá Castillo se haya podido ver un tanto desbordado con la reacción habida en redes sociales por parte de la afición, opinadores profesionales y medios de comunicación. El pasado reciente como responsable del baloncesto le ha pasado factura y quizá se ha acongojado. Todo debe haber pesado un poco, el comunicado de Castillo, quizá de puño y letra y sin editar es para desmenuzar y analizar. Dice mucho entre líneas sin llegar a decir, pero hay que saber escudriñar.

Enrique Ortiz (Fotografía: Ernesto Caparrós).

Esto no es información, es opinión particular de este periodista; Por cierto, Castillo, estás en la cincuentena sin llegar a ser sexagenario. ¿De verdad puedes llegar a pensar que cualquier tipo, más Enrique Ortiz Selfa, puede poner la pasta y tu sacar y meter, gastar y traer y llevar con total autonomía e independencia sin contar con él, cesar y contratar? ¡Qué ingenuo! ¡Qué ABSURDO!

Una cosa es la administración, representación y dirección de una empresa, en el día a día, y otra es la vara de mando. Acaso no sabes que cualquier director de entidad bancaria de la ciudad, para concederte un préstamo, está sujeto al protocolo del ordenador o de una llamada del de Alicante a Valencia, y en su caso del de Valencia a Madrid. En definitiva.

SE PRECISA:
Una persona, preferentemente figura masculina, para ser presidente del Hércules CF de Alicante. Labores de representación del equipo a todos los niveles incluido el institucional. Visto lo visto, los últimos meses, debería tener grandes tragaderas, hígado a prueba de bomba, y llevar medianamente bien tanto los insultos personales como que le mienten a su padre, madre, o parientes cercanos. Podrá decir a nietos y otros descendientes que él llegó a ser presidente del Hércules, aunque no llegase a pintar nada, pero deportivamente pasará a la historia.

SE OFRECE:
Viajará, verá partes del territorio nacional, turismo incluido, y beberá y comerá por protocolo en buenas mesas, más conocerá a mucha gente y hará relaciones sociales.  La aparición en prensa y radio está asegurada, con lo que ello pueda convenir o repercutir en positivo para su vida o negocios personales. A nivel de Alicante terminará siendo una figura, para bien o para mal. Puede salir glorioso o inmolado.  No hay remuneración económica, pero si posibilidad de ver fútbol de segunda fila, y alguna cantidad para gastos de representación, comidas, cafés y esas cosas.
El potencial presidente siempre podrá llevar al palco a amigos, familiares u otros compromisos con los que quedar bien. Entrevistas en medios locales, periódicos, radios, fotografías, redes sociales, declaraciones y mamoneo en general.  No se precisa experiencia, solamente osadía.

INTERESADOS:
Llamar al teléfono oficial del Hércules en horas de oficina, y preguntar por ENRIQUE. El cursillo de adaptación y preparación para el cargo será impartido por el Sr. PARODI.
Por favor, abstenerse personas con dolencias cardíacas o similares, el desempeño del cargo podría ser mortal de necesidad.   

PERDONEN POR LA GRACIETA. ¿RECUERDAN LO DEL PRINCIPIO, LO DEL TEATRO DEL ABSURDO DE LUIGI PIRANDELLO?

AQUÍ EN EL HÉRCULES, TAMBIÉN TODO ES ABSURDO.  

Diego Ferrándiz

Se puede ser de equipos muy grandes, muy famosos, ganadores de muchos títulos, pero nosotros somos del Hércules. Modestia y orgullo pueden ir de la mano. En nuestro corazón habita ese pálpito blanquiazul. Sentimos al Hércules, como sentimos la Explanada, el Postiguet o la Cara del Moro. Macho Hércules.

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